Gobiernos de izquierda y derecha condenaron la irrupción de la policía de Ecuador en la Embajada de México en Quito, un hecho que envuelve hoy a la nación sudamericana en un escándalo internacional y podría conllevar sanciones. Países latinoamericanos como Brasil, Colombia, Venezuela, Chile, Argentina, Uruguay, Perú y Cuba, entre otros, repudiaron el asalto que culminó con la detención por la fuerza del exvicepresidente Jorge Glas, requerido por la justicia ecuatoriana por cargos de corrupción, aunque para México era un asilado.
