Las Tunas.-La provincia de Las Tunas concluyó el 2022 con una tasa de mortalidad infantil en 6,96 por cada mil nacidos, un indicador afectado principalmente por el bajo peso al nacer, que constituye el problema de salud más constante en el territorio.
Así afirmó la especialista en Ginecología y Obstetricia Osmara López Borrero, responsable del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) en un análisis con autoridades del Partido y el gobierno, directivos del sector de la Salud Pública, las organizaciones de masas y la Unión de Jóvenes Comunistas.
Con tendencia por encima de cinco en su comportamiento, el bajo peso al nacer no permite sostener resultados materno-infantiles, subrayó López Borrero, quien alertó que este puede ser espontáneo de afecciones que se asocian al embarazo como las infecciones vaginales y genitourinarias, e inducido.
Apuntó además que también tiene otras causas como las mujeres que inician el embarazo con un peso deficiente y quienes no se prepararon junto a la familia y la pareja para la maternidad, entre ellas el grupo de las adolescentes con una alta fecundidad ascendente a un 20 por ciento, lo cual marca hoy los resultados que presenta el Programa de Atención Materno Infantil.
Igual incide la resistencia al ingreso en los 10 hogares maternos, espacios en los cuales se modifican los estados maternos asociados al embarazo que más se relacionan con el bajo peso entre ellos las ganancias de peso, la anemia y las infecciones, acotó.
Ante la actual situación la máxima representante del PAMI en Las Tunas, convocó a la intersectorialidad para transformar esta problemática de salud y a su vez convocó a la familia al acompañamiento de los adolescentes, en sus géneros, a una conducta responsable ante la sexualidad y los ingresos en hogares maternos y hospitales.
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