Las Tunas.- Dicen que Cuba es un eterno verano y yo estoy de acuerdo. Esta época del año se distingue porque el sol calienta muchísimo. Es una temporada donde todos guardamos las prendas de vestir gruesas y sacamos lo ligero.
Hay a quienes no le molesta pero hay otros que se cubren como si fuera el más crudo invierno y así protegen la piel. Lo cierto es que todos le huimos al sol, unos tapándose y otros resguardándonos.
Esta época del calendario y en este año específicamente hay que protegerse mucho más, pues al cuidado que debemos tener de los efectos nocivos ocasionados por el dios Ra se le suman los del de la corona, y no precisamente de Cristo, sino el del virus SARS-CoV-2.
/mga/
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