El boxeo tiene sus orígenes en la comunidad primitiva; desde esa época, se emplean los puños como forma de defensa, cientos de años después se convierte en práctica deportiva. Hasta el siglo XVIII se le denomina pugilato, periodo en el cual comienza a emplearse en Inglaterra el término boxeo, que significa golpear y se distingue de las disputas callejeras. A finales del siglo XIX se extiende a los Estados Unidos y con posterioridad a las Américas.