Mirtha Peña, vocación de maestra

16 de Nov de 2021
   81
Mirtha Peña, vocación de maestra

Mirtha Peña Trujillo es de esas personas que no te cansas de escuchar hablar, maestra de profesión, hoy jubilada con 76 años de edad y de ellos más de 40 dedicados al sector de la Educación.

A la edad de 14 años salió de su tierra natal en el municipio de Puerto Padre para formarse como maestra. En el Segundo Frente cumplió su servicio social y al concluir se incorporó a trabajar en el seminternado Josefa Agüero en la Villa Azul.

Amante de la historia, de la obra de José Martí y escritora de décimas, Mirtha ha sido premiada en fórums de ciencia y técnica a nivel municipal y provincial.

Cuando llegó la edad de jubilación tuvo que afrontarla debido a su delicada salud, pero en cuanto pudo se reincorporó ante un llamado del Comandante en Jefe Fidel Castro.

Este 15 de noviembre comenzó en Cuba la Jornada del Educador y el mejor regalo para todos los maestros. que como Mirtha aman la profesión de enseñar, ha sido la vuelta a las aulas de miles de estudiantes tuneros.

/mga/

Comente con nosotros en la página de Facebook y síganos en Twitter y Youtube

Últimas noticias

Comienza en Las Tunas Festival Entre Música 2025

La provincia de Las Tunas vibra desde hoy con el inicio de la décimo novena edición del Festival Entre Música, un evento que convoca a artistas jóvenes de toda la isla y que en esta ocasión rinde homenaje al son cubano.

Más leido

Otras Noticias

Yusdel Rojas, un creador de profunda sensibilidad artística

Yusdel Rojas, un creador de profunda sensibilidad artística

Cada 4 de diciembre, Cuba celebra el Día del Realizador de Sonido, una fecha destinada a reconocer a esos artistas invisibles que moldean la atmósfera, la intención y la verdad emocional de las obras audiovisuales. Son los guardianes del detalle, los orfebres de la percepción, los que hacen que una historia respire y un sentimiento encuentre su voz.

El Eco de mi silencio: Una vida entre gritos y  volver a nacer

El Eco de mi silencio: Una vida entre gritos y volver a nacer

La violencia de género no es solo un golpe que duele en la piel; es una cadena invisible que ata el alma, un veneno lento que carcome la autoestima y un yugo que pretende robar hasta el último suspiro de libertad. Es el monstruo que habita en el hogar, disfrazado de amor, y que siembra el miedo como ley. Esta es la historia una mujer, que con solo 16 años, comenzó a cargar sobre sus hombros el peso brutal de este flagelo.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *