Mel Almeijeiras, de Las Tunas al Moncada

26 de Jul de 2020
   17
Portada » Noticias » Historia » Mel Almeijeiras, de Las Tunas al Moncada

Las Tunas.- Con solo 20 años de edad ya tenía bien claro que daría hasta su sangre con tal de cambiar el destino de Cuba. Esa convicción llevó a Juan Manuel Almeijeiras Delgado a enrolarse en la llamada Generación del Centenario, que al mando de Fidel Castro protagonizaría en 1953 los asaltos a los Cuarteles Moncada de Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes de Bayamo.

Era un muchacho muy callado y reservado y quizás esta peculiaridad de su carácter y sus pocos años vividos conspiran para que sea una de las figuran menos divulgadas de esa etapa de la lucha revolucionaria cubana.

Tiempo21 conversó con Ricardo Ávalo Avilés, secretario de divulgación y relaciones públicas de la filial provincial de la Unión de Historiadores de Cuba para tener un acercamiento a la vida del mártir.

«Lo que conocemos sobre Mel nos llega fundamentalmente a través del libro testimonial de su hermano Efigenio, titulado Más allá de nosotros, ya no solo desde el punto de vista familiar, sino como revolucionario. En él cuenta que no fue capaz de traicionar la palabra dada a Fidel a pesar de saber que su hermano también simpatizaba con esa ideas, no le contó sobre las prácticas de tiro, la compra de armas, ni el viaje a Santiago».

¿Qué se conoce sobre la relación de Fidel y Mel?

«No está definida, así explícitamente como ocurre con otras personalidades históricas. No obstante, Efigenio da testimonio que días antes del Moncada, Fidel había merodeado preguntando por Juan Manuel. También, el hecho de que Mel fuera chofer de alquiler, le da la oportunidad de ser escogido en el grupo que protagonizaría la acción?».

¿A qué atribuye los errores publicados en la mayoría de sus biografías que sitúan su nacimiento en Puerto Padre y no en Pueblo Viejo, Chaparra?

« Es cierto, quizás se debe a que muy pronto, siendo pequeños se mudan a Puerto Padre y de ahí nace el error. María de las Angustias, la madre, comparada por Fidel como Mariana Grajales del siglo XX cubano, trabajaba en Puerto Padre y desarrolló su vida en ese peregrinar en el que también vivieron en Santa Clara y finalmente se instalan en La Habana».

¿Cómo la familia desde La Habana, supo de la muerte de Juan Manuel?

«En las páginas de la revista Bohemia apareció una fotografía donde la familia ve el cuerpo con la ropa con la cual había salido de su casa días antes. Uno de los hermanos hace referencia de que al cadáver le habían mutilado los dedos de las manos, seguramente cuando fue torturado antes de ser asesinado. La madre, ante la duda de que fuera su hijo, se traslada hasta Santiago de Cuba y hace averiguaciones en el propio cuartel Moncada y el cementerio, pero en ningún momento, en aquella situación, pudo descubrir el destino de Mel».

¿Qué peculiaridades de su personalidad se conocen?

«Tengo que volver al testimonio de Efigenio, que cuenta que como era apenas un año mayor que Mel, muchas personas pensaban que eran mellizos. Juan Manuel era muy dado al deporte. Era una persona muy alegre, muy jovial. Y sobre todo era muy reservado lo que se evidencia en que ni siquiera a su propio hermano le dio información sobre un paso tan importante como fue su participación en los sucesos del Moncada».

/mdn/

Comente con nosotros en la página de Facebook y síganos en Twitter y Youtube 

Últimas noticias

Protagonista Uneac en la Jornada de la Cultura Cubana en Las Tunas

Del 10 al 20 del presente mes la provincia de Las Tunas se viste de gala con la Jornada de la Cultura Cubana, un evento donde la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) en el territorio ejerce un rol protagónico con un amplio y diverso programa de actividades.

Embalses con poca agua, aunque llueve

La presa El Rincón, la mayor suministradora a la capital tunera mantiene bajo su nivel aunque en lo que va de octubre ha llovido con cierta frecuencia, manifestó a Tiempo21 Oscar Carralero Suárez, director de la Empresa Provincial de Acueducto y Alcantarillado.

Más leido

Otras Noticias

La Historia me absolverá un alegato para la historia

La Historia me absolverá un alegato para la historia

Era 16  de octubre de 1953, y en Santiago de Cuba no se respiraba justicia, sino tensión. En la Sala del Pleno de la Audiencia de Oriente, se celebraba el juicio contra los jóvenes que habían asaltado el cuartel Moncada el 26 de julio.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *