Abellán defendió la intermedia en el conjunto pinolero que perdió dos veces ante Cuba en los Juegos Olímpicos de Atlanta-1996, donde el campo corto era defendido por Eduardo Paret, quien vino al frente del equipo caribeño.
Histórico jugador de los Indios de Boer, en su natal Nicaragua, Abellán dejó sólidas marcas ofensivas, como una racha de 30 partidos seguidos bateando de hit, y como manager se ha labrado una trayectoria de éxito y liderazgo.
Para los compromisos del 15, 16 y 17 de febrero, el técnico del equipo local adelantó a Prensa Latina que han estudiado a los jugadores cubanos, a muchos de los cuales conocen de verlos en eventos internacionales.
«Confiamos en el talento mezclado en nuestro equipo, aunque aún tenemos que acoplarnos mejor, afianzar las series defensivas y ensayamos jugadas técnicas para llegar en la mejor forma al debut», acotó Abellán.
Cartagena, asistente de Abellán para esta serie y manager del campeón Santa Tecla en la liga salvadoreña, también conoce a los cubanos porque los enfrentó en el Mundial de Holanda-1986, y en otros certámenes regionales.
En sus años como jugador compartió con leyendas del béisbol cubano, como los sluggers Agustín Marquetti y Orestes Kindelán, pero aparte de crear amigos, conoció más de la idiosincrasia beisbolera de Cuba.
«Los cubanos siempre se han caracterizado por ser buenos bateadores de rectas, de pitchers con velocidad; a ellos hay que variarles el lanzamiento y saberlos leer en el plato», comentó a Prensa Latina durante una ronda de entrenamientos.
Cuba viene de perder ante Panamá la final de la Serie del Caribe que organizó de emergencia la nación istmeña, y aspira a conseguir en El Salvador un resultado que emocione al público y levante la autoestima beisbolera.
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