Las Tunas.- Unos mil 500 contribuyentes de la provincia de Las Tunas abrieron hasta la fecha la cuenta bancaria fiscal, desde la emisión de disposiciones legales que en diciembre último establecieron el perfeccionamiento del trabajo no estatal y la apertura y operatoria en cinco actividades de esta modalidad de empleo.
Según informó Onelia Vargas Tamayo, jefa del Departamento de Atención al Contribuyente en la Oficina Nacional de la Administración Tributaria (ONAT), en la provincia, más de un centenar de trabajadores de los cerca de mil 623 previstos aún no han realizado este trámite, por lo cual desde el primero de septiembre quedaron sujetos al régimen sancionador establecido en la Ley.
La funcionaria recordó que en el territorio debían cumplir con tal responsabilidad los trabajadores no estatales ropia que realizan las actividades de servicio gastronómico en restaurantes, cafeterías, bares y recreación, además de los inscritos en la construcción, reparación y mantenimiento de inmuebles, y los arrendadores de viviendas, habitaciones y espacios.
Estos últimos, acotó, acumulan los mayores atrasos en el cumplimiento de este requerimiento, cuya convocatoria la ONAT extendió durante ocho meses en los cuales, incluso, los trabajadores de la entidad concurrieron a las oficinas bancarias a fin de facilitar los trámites del proceso.
Dijo que así sucedió el 19 y 20 de agosto último, cuando a nivel nacional, la Oficina Tributaria realizó con los bancos un trabajo para requerir a los morosos y atender a los interesados en cumplir con tal responsabilidad.
Las dos instituciones unieron esfuerzos también para vincular las cuentas bancarias fiscales a una tarjeta magnética, proceso que en Las Tunas lideró el Banco Popular de Ahorro con la emisión de 927 de estos dispositivos para una cifra de poco más de mil clientes atendidos.
Sobre las características de las cuentas fiscales, explicó la directiva que las personas deben depositar como mínimo dos cuotas tributarias mensuales y, en general, transitar por esta el 65 por ciento del total de los ingresos percibidos en el mes.
Al referirse a los beneficios de esta herramienta bancaria, Vargas Tamayo significó que permite una mayor transparencia y veracidad de la declaración anual de las ganancias, facilita a la persona realizar transacciones necesarias para la gestión de su negocio e incrementa el control fiscal.
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