Potrero Hormiguero, símbolo de Las Tunas

15 de Oct de 2018
   57
Portada » Noticias » Historia » Potrero Hormiguero, símbolo de Las Tunas

La noticia del alzamiento de Carlos Manuel de Céspedes en La Demajagua, fue como una descarga para el mayor general Vicente García González el 11 de octubre de 1868. Inmediatamente de la salida de la reunión del ayuntamiento envió el aviso a sus correligionarios.

Apenas el día 4 en la reunión de El Mijial, los compatriotas habían aprobado su propuesta de levantarse en armas contra España el 14. Sin embargo, al ser descubierta la conspiración, Céspedes se adelantó para evitar el arresto.

Con premura los tuneros comprometidos con los ideales independentistas comenzaron a agruparse en el potrero Hormiguero, propiedad de Vicente García.

La espesura de la vegetación y la cercanía a la ciudad convirtieron al lugar en el cuartel general del caudillo tunero, quien desde allí planeó y ejecutó el primer asalto a la ciudad, el 13 de octubre.

[penci_blockquote style=»style-3″ pmalign=»none» author=»»] Escuche declaraciones de Víctor Marrero, historiador de la ciudad de Las Tunas

Ir a descargar[/penci_blockquote]

El historiador de la ciudad, Víctor Marrero Zaldívar, dijo a Tiempo21 que «el potrero Hormiguero estaba a una vista de la ciudad, ubicado en el actual Parque 26 de julio y se extendía hasta Yariguá. Era extensísimo el terreno. Ellos acampan en un bosque tupido para asaltar el pueblo porque estaba muy cerca».

Marrero aclaró que «los tuneros se alzaron con la bandera de Narciso López, porque era la que tenía Julián santana, que había participado en los sucesos de 1851. Eso sí, le colocaron alrededor de la estrella la inscripción Los cazadores de Hatuey, que fue como se identificaron a las tropas de Vicente García»

El 13 de octubre de 1868, los mambises asaltaron el pueblo y lo tomaron casi totalmente, con excepción de la iglesia, donde se atrincheraron los españoles. Luego de quemar la ranchería de las afueras, regresaron a sus posiciones.

Hormiguero era una propiedad dedicada fundamentalmente a la crianza de ganado bovino y equinos, y sus excelentes ejemplares fueron utilizados para alimentar a las tropas mambisas y como animales de tiro y de combate.

En esta hacienda también se dedicaban zonas al cultivo de alimentos y sirvió de refugio a las familias que se vieron obligadas a abandonar el poblado durante la guerra.

Actualmente un sencillo monumento, que pasa casi desapercibido dentro del Parque 26 de julio de la ciudad de Las Tunas, recuerda a las nuevas generaciones el lugar donde por primera vez se alzó la Bandera Cubana en el territorio y se juró luchar hasta la completa independencia de Cuba.

/mdn/

Comente con nosotros en la página de Facebook y síganos en Twitter y Youtube

Últimas noticias

Activo sector sanitario en Las Tunas ante Huracán Melissa

Ante la evolución del huracán Melissa la Salud Pública en Las Tunas garantiza la protección de pacientes y la vitalidad de los centros asistenciales en los ocho municipios, afirmó la doctora Tatiana Basterrechea Gordillo, Directora de Asistencia Médica en la Dirección General de Salud.

Trabajadores eléctricos resguardan parques solares fotovoltaicos

La protección de entidades económicas y de los recursos materiales es una de las prioridades en Las Tunas ante el paso del huracán Melissa por lo que hasta el último minuto se adoptan medidas para disminuir los daños que provocará ese peligroso fenómeno meteorológico.

Más leido

Otras Noticias

Crónica de un Revolucionario Errante: Los Viajes Secretos del Che por África

Crónica de un Revolucionario Errante: Los Viajes Secretos del Che por África

En los anales de la historia revolucionaria del siglo XX, la figura del comandante Ernesto «Che» Guevara se alza como un ícono de la lucha armada. Sin embargo, una faceta menos divulgada de su vida, pero crucial para entender sus últimos años, se desarrolló lejos de América Latina, en el suelo incandescente y lleno de promesas del África postcolonial.

La Historia me absolverá un alegato para la historia

La Historia me absolverá un alegato para la historia

Era 16  de octubre de 1953, y en Santiago de Cuba no se respiraba justicia, sino tensión. En la Sala del Pleno de la Audiencia de Oriente, se celebraba el juicio contra los jóvenes que habían asaltado el cuartel Moncada el 26 de julio.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *