El 13 de octubre, grito libertario de los tuneros

13 de Oct de 2020
   137

Las Tunas.- Tan pronto llegó la noticia a Las Tunas, del levantamiento armado de Céspedes en La Demajagua, el 10 de octubre de 1868, Vicente García González abandonó la reunión en el Ayuntamiento para mandar aviso urgente a sus hombres de concentrarse en las afueras del pueblo dispuestos a iniciar las hostilidades contra el gobierno español.

En su vasta propiedad llamada, Potrero Hormiguero, el caudillo tunero estableció su cuartel general y desde allí planeó y ejecutó su primer asalto a la ciudad.

El 13 de octubre los Cazadores de Hatuey, al mando de Vicente García atacaron el pueblo y aunque no lograron tomar la iglesia donde se atrincheraron los soldados enemigos, los mambises quemaron la ranchería de las afueras antes de retirarse a sus posiciones.

El historiador de la ciudad, Víctor Marrero Zaldívar, dijo a Tiempo21 que «en el primer asalto se quemaron unas 100 casas del pueblo, sobre todos los ranchos de las afueras, pero el resto de la ciudad centralmente quedó en pie».

El uso del machete y otras armas rudimentarias caracterizaron los combates del Ejercito Libertador.

«Estos hombres estaban armados de machetes en su mayoría, aunque contaban con algunas escopetas, algunos fusiles que consiguieron. El armamento era bastante rudimentario y los que no alcanzaron armas, con palos. Está el caso de Francisco Vega Espinosa, que usaba en la batalla las púas de yaya, un árbol de madera muy dura, que lo mismo las tiraban que las clavaban en el cuerpo del enemigo en el combate a modo de lanzas».

También fue significativa la incorporación de esclavos y campesinos a la guerra de liberación.

«La esclavitud en Las Tunas era una esclavitud doméstica, no había esclavos de plantaciones en gran número. Había un esclavo llamado Teno, que era la mano derecha de Vicente García y lo acompañó en todos los combates. A partir del alzamiento revolucionario, ya todos los esclavos fueron libres, en sentido general, sobre todo los que se incorporaron a la guerra. En Las Tunas lo que había, más bien, era un ejército de campesinos libres».

El inicio de las guerras de liberación en el territorio tunero es recordado con un sencillo monumento, en el Parque 26 de julio de la ciudad de Las Tunas, otrora Potrero Hormiguero, en el mismo lugar donde ondeó por primera vez la bandera cubana y se juró luchar hasta la completa independencia de la patria.

/nre/

Comente con nosotros en la página de Facebook y síganos en Twitter y Youtube

Últimas noticias

El 2026 está ya a las puertas

Con este diciembre, el actual calendario 2025 deshoja su último capítulo.  Los días pasan, el mes se nos va y con él dice adiós el año, uno de los más difíciles para los residentes en la provincia de Las Tunas y en toda Cuba, aunque mantiene la certeza de que siempre hay que mirar hacia adelante.

Los Leñadores llegan a 45 victorias

Los Leñadores de Las Tunas tuvieron una gran ofensiva para derrotar 13×4 a los Tigres de Ciego de Ávila y se convirtieron en el segundo equipo en alcanzar las 45 victorias en la campaña. 

Más leido

Otras Noticias

El día en que la columna 12 perdió a su artillero 

El día en que la columna 12 perdió a su artillero 

Casi dos meses hacía ya de la llegada de la columna rebelde, a la que le habían encomendado estratégicas misiones en la parte más occidental de la actual provincia de Las Tunas, cuando en uno de esos cometidos pierde a su mejor artillero.

Legado de coraje y ternura

Legado de coraje y ternura

El 28 de noviembre de 1893, se apagó el corazón de Mariana Grajales. Pero no su legado ni su ejemplo. Nacida en Santiago de Cuba en 1815, Mariana no fue solo madre de Antonio, José y tantos otros hijos que empuñaron el machete por la independencia. Fue madre de una causa, de una ética, de una Cuba que aún no existía, pero que ella ya soñaba libre y digna.

Fidel: el pulso de la Revolución

Fidel: el pulso de la Revolución

Hay figuras que se imponen por sus ideas, otras por su voz. Fidel Castro lo hacía por ambas y por algo más, su carisma, por ese magnetismo que convertía cada palabra en un acto, cada gesto en símbolo, y cada silencio en mensaje.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *