Tiempo21 de Radio Victoria

Las Tunas.- Decomisos, multas, ventas forzosas, acciones de prevención, intercambios con personas desvinculadas, reforzamiento de los patrullajes y barrios debates sobre el consumo de estupefacientes destacan entre las acciones en Las Tunas en el marco del Tercer Ejercicio Nacional contra el Delito, la Corrupción y las Indisciplinas Sociales.

En esta oportunidad vuelve un ejercicio que, si bien su propósito no es erradicar estos males sociales, pretende movilizar la conciencia ciudadana y ratificar la voluntad del país de combatir un flagelo que lacera la sociedad.

En las dos primeras jornadas de este ejercicio se habían realizado 339 inspecciones a actores económicos, tanto estatales como privados, detectándose 139 violaciones de las normas establecidas.

Sobresalen las cinco ventas forzosas en el municipio cabecera, en Manatí fueron decomisados 20 litros de leche y 40 botellas de bebida artesanal, mientras que en Puerto Padre y Majibacoa se clausuraron dos locales.

Alarmante resulta la detección de un individuo en la Villa Azul de Puerto Padre con mil blíster del medicamento conocido como alprazolam, y otros dos individuos que transportaban una gran cantidad de leche y yogurt natural en la ciudad de Las Tunas, donde incautaron en uno de sus puntos de control varios sacos de café que eran trasladados de manera ilegal.

Entre las acciones de prevención resaltan el intercambio con 91 personas desvinculadas, de las cuales 20 fueron ubicadas laboralmente; mientras que de los  12 sancionados visitados y que son beneficiados por la libertad condicional 11 se habían incorporado a actividades socialmente útiles.

Las acciones profilácticas y barrios debates sobre el consumo y comercialización de drogas han llegado a instituciones docentes y comunidades con alta incidencia en tan nocivas conductas, varias de ellas constitutivas de delitos graves.

En este ejercicio, además de las fuerzas del Ministerio del Interior, intervienen los grupos de inspección de todos los organismos; al tiempo que de vital trascendencia resulta el acompañamiento de las organizaciones políticas y de masas y el propio pueblo, que sin reparos denuncia y a la vez se suma y reconoce la necesidad de estás acciones.