Las Tunas.- La zafra azucarera, y todas las actividades que se desarrollan en torno a la misma, centran la atención como tareas prioritarias de la economía cuando la unidad empresarial de base (UEB) Antonio Guiteras pretende extender la molida hasta el mes de mayo.
La actual campaña presenta una atraso considerable y el mayor tiempo perdido radica, precisamente, en el proceso industrial por el déficit en el suministro de la materia prima, roturas y mala calidad en las reparaciones en áreas del coloso puertopadrense.
Son muchas las incidencias negativas en esta campaña, entre ellas la deficiente planificación en la elaboración de los estimados cañeros, balance de los recursos materiales, estrategia de corte y del plan de producción.
Además afectan el deterioro en la disciplina laboral y tecnológica por falta de exigencia de los cuadros, altos enyerbamientos, al no recibir las plantaciones una correcta atención cultural, e incendios en los cañaverales, que dañan la cosecha en particular en el corte de los pelotones de combinadas.
Pese a esa realidad tensa y compleja, los azucareros buscarán, en esta etapa crucial, producir el máximo volumen del crudo y llevar toda la caña disponible al tándem del coloso.
Asimismo, centrarán los esfuerzos en revertir los resultados en la siembra incumplida al cierre del primer trimestre del año, debido a la inconsistente labor de las unidades empresariales de atención a productores cañeros.
Duplicar las plantaciones en este abril, programa que garantizaría el crecimiento en toneladas de la materia prima con una fuerte participación de los colectivos, fue la convocatoria que realizó el secretariado provincial del sindicato azucarero en la provincia.
La reflexión también busca sacar las lecciones para desterrar definitivamente los problemas subjetivos, presentes en la cosecha, pues pese a las dificultades se podría alcanzar mejores rendimientos si se inyectan las necesitadas dosis de rigor, exigencia, control y cambio de pensamiento tanto en el proceso agrícola como fabril.