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Descrucemos los brazos a favor de las mujeres

Las Tunas.- Puertas adentro, con ventanas abiertas o cerradas, su casa no es un hogar ni la hace feliz, a no ser cuando su mirada encuentra los ojos amorosos de sus hijos. Entonces la decisión nace de sus lágrimas y guarda silencio, perdona una y otra vez y aparenta una felicidad vacía, solo para que los demás no hablen.

Las huellas de su cuerpo- incluso de su rostro- desaparecen a los pocos días. Pero, su alma queda herida y entre sus cicatrices internas apenas hay espacio para saberse valiosa, aunque en una de las paredes cuelga un título de Licenciada, y en su centro de trabajo es muy útil.

Esta es la historia de una amiga, querida por muchos. La esconde de todos como si ella fuera la culpable de cada golpe y cuenta de los paseos que hacen o lo mucho que él “lucha la vida” en estos tiempos difíciles, de tantas estrecheces económicas.

Sigue siendo infeliz porque prefiere que los niños crezcan con su padre y que tengan satisfechas sus necesidades, para lo que no basta el salario. Y así pasa el tiempo, y la vida. Y vuelve a llegar noviembre, y otra vez se habla de violencia intrafamiliar, especialmente hacia las mujeres.

Este es un fenómeno recurrente en Las Tunas. Tanto, que a nivel social duele. Sobre todo, en comunidades rurales, cuando el dominio llega por costumbres ancestrales, que ponen a las mujeres como propiedades personales y no como compañía y elección. Pero, la violencia contra la mujer también ocurre en ciudades y poblados y a veces las consecuencias son insuperables.

Allá o acá, en cualquier mes del año, hay esperanzas para las víctimas y oportunidades para recomenzar una etapa de paz, sin golpes, burlas o desprecios, sola o con otro corazón que sí respete y que favorezca el crecimiento espiritual y la alegría.

Casi siempre ellas guardan su dolor y muchas personas, incluidas mujeres, prefieren no preguntar y mirar hacia el otro lado. Pero, el silencio estimula al verdugo. Hoy es una, mañana pudiera ser otra. Por eso es el momento de descruzar los brazos.

/lrc/

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