LasTunas.- Uno de los asuntos más analizados en el octavo Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) fue el de la Política de Cuadros. La resolución sobre el tema ratifica que quienes dirigen se deben caracterizar por su estrecho vínculo con las masas, capacidad de movilizar, dialogar y poseer un alto grado de sensibilidad política y humana.
El Coordinador municipal de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en Las Tunas, Armando Cruz García, considera que en el caso de la organización los cuadros deben tener suficiente capacidad para buscar alternativas a los problemas actuales y lograr que la gente los siga por el camino que están planteando.
«Eso está muy sujeto al ejemplo personal de los cuadros, a cómo logran convertirse no en el jefe sino en el líder, es una cuestión compleja pero depende de los valores que lo caracterizan, sensibilidad, humanismo, preocupación por sus trabajadores al mismo tiempo que les exige y plantearse retos superiores con los pies y oídos puestos en la tierra para saber las limitaciones que enfrentamos, a fin de poder cumplir esos objetivos».
Cruz García añadió que una adecuada política de cuadros tiene que ver con el proceso de selección, preparación e incluso estimulación y reconocimiento de quienes dirigen, que en ocasiones tienen que sacrificar muchas cosas personales y no siempre reciben la atención adecuada.
«Yo creo que lo más importante que dejó el evento en la materia es, además de la prioridad que tiene para el Partido y el Presidente cubano, el reconocimiento de que todos somos cuadros de la Revolución».
Hoy hablamos de que para ser cuadros profesionales y reservas de las organizaciones un requisito es la experiencia de dirección en su centro de labor, eso ayudaría a aportar más en el nuevo cargo, aunque se siga preparando, resaltó el coordinador municipal de los CDR.
Dijo que la cita partidista perfeccionó un grupo de orientaciones que existían, esto vendría a transformar el sistema de preparación, los requisitos, el reto que se está planteando de que los cuadros administrativos tengan experiencia en las organizaciones y viceversa y el establecimiento de vínculos que permitan estudiar más la actividad que se hace.
Las escuelas del PCC estarán abriendo próximamente una maestría en Dirección política de la sociedad, lo que va a permitir la superación profesional, pero desde la propuesta a mejorar los procesos que se dirigen, o sea, cómo darle solución desde la ciencia a un problema puntual en la actividad, ello posibilitará lograr un vínculo entre la ciencia y la dirección que es lo que están pidiendo las máximas autoridaes del país, señaló.
Apuntó que el octavo Congreso ratificó que el vínculo con la base es un principio para dirigir una sociedad socialista, la única forma de realmente saber que sucede, cómo la población valora lo que se está haciendo y aprovechar la inteligencia colectiva para solucionar los problemas y transformar la situación ante el complejo contexto económico que atraviesa el país.
La talla de líderes como Fidel y Raúl deja la varilla muy alta a la nueva generación de cuadros que demuestra incondicionalidad y compromiso en la tarea y mayor exigencia en el trabajo cotidiano, asuntos vitales para cumplir los acuerdos de la magna cita partidista, destacó.
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