Por: Vicente Ignacio Álvarez Morell
Las Tunas.- Este lunes 10 de marzo, con el repique de las campanas de la Iglesia Parroquial Mayor de San Jerónimo, inició el acto de bendición que marcó de manera oficial las esperadas obras de restauración del centenario templo tunero.
Tras seis años de deterioro estructural y desafíos económicos, la comunidad cristiana, con el apoyo de la diócesis y donaciones externas, ha logrado finalmente reunir los recursos necesarios para llevar a cabo la restauración del emblemático edificio ubicado en el corazón de la ciudad de Las Tunas y preservar así la belleza arquitectónica original a la vez que apuesta por la modernización de sus espacios.
La Parroquia San Jerónimo ha sido testigo de importantes acontecimientos históricos y sociales en la vida de la comunidad. Su distintivo estilo arquitectónico ecléctico ha hecho de este templo es un punto de referencia visual y un símbolo de la identidad local. Sin embargo, el paso del tiempo ha provocado un deterioro significativo en su estructura, afectando elementos claves como el techo, las paredes, el campanario y los sistemas eléctricos, entre otros.
“Este es un día histórico para nuestra comunidad” declaró el párroco Pedro Pablo Ladrón de Guevara Cruz durante el acto de bendición, al referirse al inicio de las obras, catalogando este como un signo de esperanza en el camino cuaresmal. Agregó además que la reconstrucción de la Parroquia no es solo la restauración de un edificio, sino la reafirmación de nuestra fe, nuestra historia y nuestro compromiso con las futuras generaciones.
Como un signo visible el párroco tunero dio la bendición al edificio y a los asistentes con la Biblia de plata, una bella imagen que hizo referencia a san Jerónimo, el que tuvo el encargo de la traducción de las Sagradas Escrituras.
El proyecto de reconstrucción, liderado por la Empresa Emprestur S.A. de Las Tunas, se desarrollará en varias fases a lo largo de los próximos meses. La primera fase ha iniciado con la colocación del cercado perimetral para la protección de la obra, la posterior consolidación de la estructura, incluyendo la reparación de grietas y fisuras, entre otras acciones. Más delante continuará con la restauración de la fachada, la carpintería y la restauración de los elementos decorativos que se han visto afectados por la contaminación y el paso del tiempo.
Una de las prioridades del proyecto es la preservación del patrimonio histórico y artístico de la parroquia, dentro del que resaltan visiblemente las campanas de bronce con las inscripciones fundacionales. En este sentido los arquitectos y restauradores trabajarán en estrecha colaboración con expertos en restauración y conservación para garantizar que los materiales y técnicas utilizados sean compatibles con los originales y que se respeten las características arquitectónicas del edificio. Se espera que durante el proceso de restauración se resalten otros elementos originales, lo que permitirá una mejor comprensión de la historia de la parroquia y su importancia cultural.
Además de la restauración de la estructura existente, el proyecto también incluye en un futuro la modernización de las instalaciones para mejorar la accesibilidad y la funcionalidad del edificio, la instalación de nuevos sistemas de iluminación y sonido, la mejorará la ventilación, y la creación de un acceso para personas con movilidad reducida. También se beneficiarán los espacios destinados a la catequesis y las actividades comunitarias, lo que permitirá a la parroquia seguir cumpliendo su papel como centro de encuentro y participación ciudadana.
Desde el cierre del templo parroquial, en octubre de 2019, las celebraciones religiosas y los servicios pastorales se trasladaron para la Capilla “Jesús Buen Pastor” y el Centro Pastoral “San Jerónimo”, radicando en este último además la Oficina Parroquial y el Archivo Sacramental que data de 1787.
En sus declaraciones el padre Pedro Pablo Ladrón de Guevara Cruz, animó a los asistentes cuando dijo “sabemos que este proceso de reconstrucción será largo y desafiante, pero estamos convencidos de que el resultado final valdrá la pena,» afirmó además que “la Parroquia San Jerónimo volverá a ser un lugar de paz espiritual y de encuentro para todos, un símbolo de esperanza y de renovación para nuestra comunidad cristiana”
El proyecto de reconstrucción representa un importante logro tanto para la comunidad cristiana como para la ciudad de Las Tunas, en aras de la preservación del patrimonio cultural y la promoción del desarrollo comunitario. La comunidad cristiana continuará orando a Dios por la realización exitosa de este proyecto de restauración.
/mga/
Comente con nosotros en la página de Facebook y síganos en Twitter y Youtube