Cada obra que cuente con el protagonismo de la mujer, siempre será una obra de infinito amor. Pastora Bárbara Rondón Pereira inicia la labor de custodio en el 2004, luego fue rotulista y desde el 2019 se desempeña como administradora en el cementerio municipal de Colombia.
«Ser rotulista es un servicio bonito que el familiar te lo agradece, porque haces la dedicatoria a alguien que amaban, y dejas el respeto en ese escrito».
Bárbara nunca ha sentido temor de trabajar en este lugar; esa fuerza y dulzura de mujer le permite desempeñarse al frente de su colectivo laboral.
«Durante la Covid-19 permanecía en el cementerio a la hora de los entierros; gracias al apoyo de mi esposo y mis dos niños.
«Seguiré aquí, el trabajo con el público es algo hermoso, cuando llega un familiar y le dice una palabra de agradecimiento, eso te ayuda a continuar en esta labor».
Bárbara es una abnegada mujer, administradora en el cementerio municipal de Colombia, tarea a la que se entrega cada día con ternura y pasión.
/mga/
Comente con nosotros en la página de Facebook y síganos en Twitter y Youtube