Las Tunas. – Durante las últimas horas y en pleno desarrollo de la Tarea Ordenamiento se detectaron violaciones y deficiencias en el municipio de Las Tunas, como una muestra de la falta de exigencia de las autoridades competentes para hacer cumplir con lo que está establecido.
Entre las indisciplinas sobresalen los altos precios de los productos agropecuarios sin respaldo de calidad en algunas placitas, la mala calidad en la elaboración de los alimentos en el Sistema de Atención a la Familia, ausencia de productos y precios en las tablillas de unidades gastronómicas, alteración de precios en la pizzería La Milanesa, ventas de productos no autorizados por trabajadores no estatales y la falta de higiene en varios establecimientos gastronómicos.
Inspectores integrales multaron con dos mil pesos a un vendedor de maíz molido y otro de carne de cerdo por sus precios abusivos, al igual que a cocheros con cobros por encima de lo establecido por el Consejo de la Administración. En la bodega de Jobabito penalizaron a los responsables de que la pesa no estuviera certificada y que los discos de pesaje tuvieran pedazos de plomo para engañar al consumidor.
Las inspecciones gubernamentales detectaron infracciones de algunos vendedores de productos agropecuarios, que habían sido multados decenas de veces con cuantías de miles de pesos. Ello demuestra la falta de rigor y exigencia ante conductas reincidentes, cuyos autores continuaban desarrollándose en sus gestiones, la mayoría de manera ilegal.
En medio de la difícil situación por la Covid-19 y el recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos, Cuba está inmersa en la corrección de determinadas distorsiones en la sociedad y propicia una mayor incorporación al trabajo, sobre la base de la disciplina laboral y la eficiencia, en busca de un desarrollo pleno de la ciudadanía. Y la acción de todos es decisiva para erradicar las malas conductas y las deficiencias en todos los sectores.
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