Las Tunas.- La vorágine de la zafra exige organización y mucha disciplina tecnológica, de ahí la importancia de lograr en esta etapa la preparación del personal con que cuenta el sector azucarero en cada eslabón de la agroindustria.
En ese sentido Elsa Lerma Ventura, directora de capital humano en la Empresa Azucarera de Las Tunas, dijo que esta actividad se planificó con prioridad para la reevaluación del desempeño en el coloso Antonio Guiteras, de Puerto Padre, y del Colombia, en el municipio homónimo, en este último con la peculiaridad que la preparación no va a ser emprendida desde la unidad empresarial de base, sino diseñada desde la provincia, con especialistas que se seleccionaron en cada uno de los ingenios.
Así mismo se prioriza la cosecha con la preparación de unos 32 operadores de combinadas, de ellos seis del municipio de Amancio Rodríguez, ocho de Colombia e igual cifra de Majibacoa, con la diferencia, además, de realizar las actividades en cada uno de los territorios.
En Colombia, se pretende crear un pelotón escuela integrado por 15 estudiantes graduados recientemente de mecanización agropecuaria, para lo cual se trabajó con intención desde la práctica laboral.
Con el propósito de fortalecer la cosecha de la caña, en Las Tunas se orientó además la vinculación y atención a los educandos de los politécnicos, como centros de referencia en la formación profesional de los técnicos y operarios de los medios que intervienen en la recolección de la gramínea.
La directora de capital humano en la Empresa azucarera de Las Tunas explicó que la capacitación de la fuerza está diseñada por etapas, la primera de ellas comprende las tareas antes mencionadas, mientras la segunda debe comenzar en el mes de septiembre con la capacitación en centros especializados para ello, pero con una plantilla más reducida para cumplir con las normas sanitarias establecidas para el prevención de la Covid 19.
Esa labor se lleva a adelante teniendo en cuenta las dificultades que se sucedieron en la contienda anterior, pero con disciplina y organización para alcanzar la calidad requerida en la preparación de los trabajadores, sobre todo los que se desempeñan en puestos claves en las industrias.
La garantía de contar con una fuerza de trabajo calificada en el sector azucarero comienza con el rescate de los sistemas de trabajo, la disciplina y la atención a los trabajadores, aspectos que llevan a la permanencia de los hombres y mujeres en este sector estratégico para la economía cubana.
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