Las Tunas.- Nelsy Rubén Larroche es la primera mujer internacionalista de la prensa en la provincia de Las Tunas, una de las más antiguas protagonistas de Radio Maboas, emisora que este 5 de abril cumple 55 años de amor por la radio.
Luego de 38 años activa, ahora como jubilada, continúa en la profesión que ama.
«La radio ha significado mucho para mí, incluso ahora puedo hacer cosas que antes por cuestiones de responsabilidad, no hacía. En la radio tuve la posibilidad de llevar la realidad de los cubanos que estaban en Haití cumpliendo misiones, por ejemplo, en la pesca, la construcción, la cultura, la salud, para que todo nuestro pueblo conociera la labor de nuestros profesionales de esas especialidades.
«También obtuve premios, no solo en festivales provinciales, municipales, sino también a nivel nacional, como parte de ese quehacer diario de reflejar la realidad de los amancieros. Mis dos hijos y dos nietos formaron parte de esa vida. Sin el apoyo de la familia no hubieran sido los resultados, porque es un medio que llegas en la mañana, pero no sabes cuándo vas a salir, y verdaderamente para mí significó mucho».
Aparte de las responsabilidades que le tocó llevar, nunca dejó de hacer periodismo.
«Tuve responsabilidades, pero nunca dejé de ser periodista, comencé como redactora cuando me gradué en el año 1983 y de ahí fui jefa de Información; estuve ocho meses en Las Tunas, y después me quedé como subdirectora de programación.
«Por problemas de salud de mi mamá regresé a Amancio, pero seguía haciendo radio, y asumí la dirección de la emisora, pues había un movimiento de cuadros en ese momento, pero nunca dejé de hacer periodismo; la radio te atrapa».
Los tiempos modernos han transformado la radio y nosotros con ellos, y sus diferentes modos de hacer.
«La radio ha cambiado mucho. Ahora hay muchas limitaciones, pero cuando yo empecé, recuerdo que era una grabadora grandísima con la que trabajamos, que casi no podía con ella, a veces hasta intentaba grabar y no grababa (sonríe) y la digitalización vino a hacer que los trabajadores de la radio pudieran hacer cosas diferentes, no solo desde el punto de vista periodístico, sino también en la realización. Lo único que no he hecho es la realización de sonidos, por un problema de respeto; estuve en la dirección y siempre he dicho que el realizador es el que debe tocar las máquinas, pero hice locución, dirección de programas, asesoría, periodismo.
«Independientemente de que en estos años hemos tenido un bloqueo férreo, en los últimos tiempos la labor de comunicación se ha complejizado, porque tenemos que llegar a varios lugares que a veces se dificulta por la situación del transporte, y hay que reflejar esa realidad, lo que hacen en nuestros campos para lograr la alimentación de nuestro pueblo, por ejemplo».
El reto es hacer la radio que impone la actualidad.
«Independientemente de las limitaciones externas que tenemos, toda la desinformación que tratan de hacernos y que incluso nos atacan a nosotros, como nos tildan de oficialistas, hay que hacer la radio que necesita estos tiempos. Cada uno nos tocó vivir una etapa, pero esta de ahora es más difícil que la que yo viví, porque había problemas de recursos técnicos, y ahora tenemos la tecnología más sofisticada, pero tenemos esa desinformación externa que a veces lastra lo que nosotros queremos llevar, la realidad».
Una jubilada que siempre pertenecerá a la radio.
«Estoy jubilada, pero sigo aquí. A veces estoy en la casa y, tal vez por los años de experiencia, yo sé lo que está pasando en la radio con solo escucharla. Les digo a los jóvenes que la amen como la amamos los que permanecemos aquí. En ocasiones por la noche me pongo a grabar un testimonio de un programa de historias de vida, o en la madrugada me levanto y digo, ´voy a empezar así´, porque la radio no es de un momento específico, es cuando nace.
«Creo que el principal reto es mantener nuestra audiencia, y hacer que la gente no se informe, y también se recree. Y la radio, en el tiempo de la covid hizo cosas diferentes, y debemos retomarlas; la gente disfrutó de la radio».
En el año 2018 Rubén Larroche obtuvo el Premio al Mérito Periodístico y el «Rafael Urbino» a la obra de la vida. Ejemplo de entrega y compromiso.
Historias como estas, hacen de la Novia Sonora del Guacanayabo la voz indiscutible de un pueblo que se identifica con una casa desde el dial, capaz de tocar generaciones que han crecido al amparo de sus ondas sonoras. ¡Enhorabuena colegas!
/mga/
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Excelente
Excelente periodista de Radio maboas merecido premio les agradecemos que nos siga acompañando felicidades