Si las potencialidades de las Mipymes fueran aprovechadas por los gobiernos locales de la provincia de Las Tunas habría un mayor desarrollo en los municipios, porque posibilidades tienen para aumentar su aporte no solo para la economía, sino para el beneficio directo de cara a la población.
Esta es una verdad indiscutible, porque las Micro, pequeñas y medianas empresas fueron creadas para impulsar la economía, aunque en la práctica haya distorsiones como consecuencia de una deficiente guía y control de los organismos competentes y de los propios consejos de la administración, que todavía no han encontrado la fórmula para lograr que todas esas formas no estatales sean aliadas a los intereses comunes de toda la sociedad.
En la actualidad son muchos los que critican a las Mipymes, pero alguien se ha puesto a pensar en ¿qué pasaría ahora mismo si no existieran? Porque nadie puede negar que son ellas las que sustentan la mayor parte de la alimentación del pueblo y aun con los altos precios que prevalecen (consecuencia también del poco control y exigencia) siempre están llenas de clientes y las ventas no se detienen.
Por tanto, esas estructuras económicas tienen ventajas que deben ser aprovechadas por los gobiernos locales para impulsar el propio desarrollo de los municipios en todos los sentidos, porque además de proveer a la población de alimentos básicos, son generadoras de empleos, y están diseñadas para aportar un alto porcentaje de ingresos al presupuesto del Estado, aun cuando en la práctica no depositan en los bancos todo el efectivo que deben depositar y algunas evadan el fisco con el no uso de sus cuentas fiscales, deficiencias que son resultado del débil control y la exigencia y esto es algo en lo que se debe insistir.
Es cierto que muchas de estas formas económicas no estatales se dedican a la gastronomía y venta de alimentos y bebidas, y el comercio, por lo que es necesario enrumbar los objetivos hacia la producción de bienes y servicios y evitar su papel de revendedoras, y eso se puede lograr con una estrategia bien pensada en la conformación de las que están por crearse.
También hay que destacar que existen varias Mipymes que aportan donativos para personas vulnerables e instituciones sociales, a los hospitales, hogares de ancianos, casas de niños sin amparo filial; realizan ventas con precios diferenciados para trabajadores de la salud y la educación, lo cual demuestra que sus dueños tienen un compromiso con el pueblo y con su propio compromiso social.
Si los organismos competentes trabajan con los responsables de esas formas económicas en el control y la exigencia de la declaración de los impuestos reales de sus utilidades, para pagar los impuestos que corresponden, lo cual es totalmente legal y obligatorio, disminuir los precios de sus productos y algo que es vital en estos tiempos: lograr un mayor encadenamiento con unidades del comercio y la gastronomía y otras formas productivas estatales, las Mipymes podrían aportar mucho más a la sociedad, y es una asignatura el aprovechar todas las ventajas que ofrecen y su incorporación a la Estrategia de Desarrollo Municipal.
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