Cada 7 de diciembre los cubanos asisten a rendir solemne homenaje a los héroes caídos en misiones internacionalistas como parte de la Operación Tributo.
En el municipio de Colombia, la necrópolis de la ciudad acogió la conmemoración en el aniversario 35 y se recordó al lugarteniente general Antonio Maceo y su ayudante Francisco Gómez Toro, caídos en combate el 7 de diciembre de 1896 en Punta Brava.
Familiares de los caídos le dieron el beso eterno a sus hijos, hermanos y padres, con una flor en la mano y en la otra desde el corazón, mientras las lágrimas brotaban y corrían por las mejillas, en señal de que nunca serán olvidados.
Así lo aseguró Mildrey Plana Viñales, primera secretaria del Comité Municipal de la Unión de Jóvenes Comunistas, al resaltar la valía de estos héroes cuyo ejemplo es guía para las nuevas generaciones.
Trabajadores, niños y jóvenes marcharon hasta este sagrado lugar, acompañados de las máximas autoridades políticas y gubernamentales del territorio.