Las Tunas.- Como muchos otros, este año 2024 será inolvidable para el sector cooperativo y campesino de la provincia de Las Tunas, tanto por su aporte en la producción de alimentos, como por el proceso asambleario de cara al XIII Congreso de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP).
Aunque todavía los resultados no son los que demanda la población, diversos análisis en las organizaciones de base demuestran la importancia de hacer contrataciones más efectivas, acopiar el total de las producciones, diversificar los cultivos y aprovechar mejor las áreas disponibles.
En ese sentido, la respuesta de los productores tuneros ha sido positiva, a pesar de las difíciles circunstancias que imponen el recrudecimiento del bloqueo estadounidense contra Cuba y la crisis económica, lo que repercute en la falta de combustible y otros importantes insumos.
El actual calendario ha sido un período difícil para las 159 organizaciones de base y los 20 mil 235 asociados a las Cooperativas de Producción Agropecuaria y de Créditos y Servicios pues a las carencias materiales se añaden serios problemas de impagos a los productores y los hechos delictivos contra el ganado mayor.
Según datos recientes, aproximadamente el 80 por ciento del total de la leche, la carne vacuna y de los diferentes renglones de cultivos varios que se producen en el territorio dependen del esfuerzo del sector cooperativo y campesino y ese es un resultado que dedican al venidero congreso de la ANAP.
En los ocho municipios tuneros, la organización proyecta un 2025 con resultados superiores y desde ya diseña acciones para transformar el pensamiento de los productores y sumarlos a la siembra de cultivos de ciclos cortos y la consolidación de prácticas agroecológicas para contrarrestar la falta de recursos.
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