Las Tunas-. Es la Cooperativa Maniabo, de esta oriental provincia de Las Tunas, un lugar en armonía con el medio ambiente, todo gracias a las herramientas, medios, y novedosas tecnologías situadas allí como uno de los beneficios del proyecto nacional de articulación agroecológica.
Muchos de estos beneficios son palpables en este centro que ha logrado incrementar sus producciones sobre bases agroecológicas que les han permitido mejorar las producciones de leche, cultivos varios, así como un mayor conocimiento de los finqueros, que ahora son capaces de poner en práctica tecnologías avanzadas y otras que desde hacía mucho tiempo no se empleaban.
Ubicada a unos cinco Kilómetro y medio por la carretera que va hacia el municipio de Jobabo, al sur de la capital tunera, esta cooperativa, cuyo objeto fundamental es la producción lechera, alcanzó un incremento notorio en los volúmenes de acopio y creció en más de cien mil litros en relación al año anterior.
Los que inicialmente fueron áreas pobladas de marabú, son hoy terrenos productivos para cosechar viandas, hortalizas y frutas, además de potenciarse la cría animal, y la recuperación de los pastos y forrajes como la moringa, la morera, el Kings Grass y la caña, así como la reforestación mediante la utilización de postes vivos de arbustos como el júpito, el almacigo y otras variedades que sirven de protección y sombra para los animales pero también como alimento animal.
Así mismo creció la base alimentaria de un 52 a un 82 por ciento de las necesidades, gracias a la puesta en marcha de prácticas que van en función de la conservación y el mejoramiento del medio ambiente y la protección de las personas, porque las producciones son de origen orgánico y, por tanto, más saludables.
Atemperado al proceso de actualización económica, en la Maniabo se incluyeron los campesinos acogidos a la ley 300 a las nuevas prácticas, lo que posibilita ampliar la cantidad de áreas, a la vez que entregan parte de sus producciones para asegurar la sostenibilidad alimentaria.
En las fincas, vaquerías, micro vaquerías y áreas de desarrollo las producciones se benefician por igual el estado y la comunidad, con una base alimentaria de más del 80 por ciento, que permite ya obtener excedentes productivos y contar con el alimento del próximo año, sin dejar de reportarle ingresos al campesino que la trabaja.
La unidad además cuenta una finca de semillas que abastece todas las áreas para continuar incrementado los pastizales y favorece la comercialización de semillas con cooperativas vecinas.
Los 25 productores que integran la Maniabo ya no solo son conocidos por la aplicación de la tecnología de los pedestales vacunos para incrementar la producción de leche; ahora también se distinguen por la esmerada atención que brindan a la masa ganadera, que creció hasta unos dos mil 400 ejemplares, con una natalidad del 74 por ciento, un logro impensado hace dos años atrás cuando las muertes alcanzan hasta 300 animales en un año.
El proyecto de articulación agroecológica en Las Tunas no solo beneficia a la Unidad Básica de Producción Cooperativa Maniabo, sino además a ocho servicios técnicos, entre ellos: la Clínica Veterinaria, el Laboratorio de Sanidad Vegetal, la Finca de Semillas botánicas, el Centro de Reproducción de Entomófagos y Entomopatógenos y el Laboratorio provincial de Suelos; centros que también apuestan por la sostenibilidad alimentaria y el cuidado del medio ambiente.
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